El diez por ciento de los mexicanos padecen insuficiencia renal crónica, pero hay avances al respecto.

Uno de cada diez adultos en este país, esto es, alrededor de trece millones, vive con enfermedad renal crónica, lo más lamentable. es que la mayoría no lo sabe, pues tan sólo están identificados entre 150 y 180 mil.

Estos pacientes están en un tratamiento, que es una manera de soporte vital mediante el cual se extraen toxinas y el exceso de agua de la sangre y que se utiliza como terapia renal sustitutiva tras la pérdida de la función renal, en alguna de estas dos variantes: de "diálisis",  o "hemodiálisis", es decir, son personas que viven una etapa a la que han llegado cuando sus riñones han perdido más de setenta por ciento de funcionalidad, explicaron especialistas en nefrología, que es la especialidad médica, una rama de la medicina interna, que se ocupa del estudio de la estructura y la función renal, tanto en la salud como en la enfermedad, incluyendo la prevención y tratamiento de las enfermedades renales.


Una cirugía de extracción de riñones para ser usados como donación. Foto Marco Peláez / Archivo.

A propósito del "Día Mundial del Riñón", que se conmemora el 10 de marzo, José Guadalupe Cardona, ex jefe del servicio de nefrología en el Hospital General Regional 25 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), advirtió que el padecimiento “ha estado olvidado”.

Su relevancia se hace evidente, en consecuencia de que hay más de 17 mil personas que requieren un trasplante de este órgano en el país.

Aclara la diferencia entre las terapias de limpieza sanguínea:

Diálisis peritonealEsta es una técnica que utiliza para filtrar la sangre y limpiarla de impurezas una membrana natural: "el peritoneo" (membrana que recubre la cavidad abdominal). De esta manera la sangre se filtra sin salir del cuerpo. El líquido de la diálisis se introduce en la cavidad peritoneal a través de un catéter previamente implantado con una pequeña intervención quirúrgica. Una vez pasado el tiempo en que se produce el intercambio de sustancias a través de la membrana peritoneal, el líquido utilizado se extrae con los productos de deshecho.

Existen dos modalidades de diálisis peritoneal: La primera es la conocida como "manual", en la que el paciente se realiza una media de entre tres y cinco intercambios al día dependiendo sus necesidades. Y la segunda es la "automática", en ella los cambios se realizan por la noche con intervención de una máquina que llamamos “cicladora”. En ambas modalidades (técnicas) se debe realizar en un medio adaptado en la residencia del paciente, resultando fundamental la higiene y los cuidados de asepsia y antisepsia.


Ilustración de la Dialisis Peritoneal. Tomada de Cancercarewny.com.

HemodiálisisSe trata de un procedimiento de depuración sanguínea extracorpórea; a través de un acceso vascular especial se extrae la sangre del paciente para hacerla pasar a través de un filtro o dializador que contiene una membrana semipermeable con un líquido de diálisis (dializado) de características predeterminadas. Al entrar en contacto ambos fluidos de diferente concentración, se produce un intercambio de tal forma que la sangre retorna al paciente libre de impurezas. Esta técnica puede efectuarse en el hospital, en un centro de diálisis o en el propio domicilio del paciente. Esta última situación es menos frecuente, aunque está creciendo en número en los últimos años y precisa una implicación del paciente que es el que se hace todo el tratamiento.

Entonces sucede que se utiliza una máquina (dializador) que sustituye las funciones principales del riñón: eliminación de sustancias y de líquido, y regulación del equilibrio ácido-base. Pero en ningún caso la hemodiálisis suple las funciones endocrinas ni metabólicas de los órganos. Realizando dos funciones principales:

Depuración: el dializador elimina de la sangre elementos que debería filtrar el riñón mediante procesos de difusión como la urea y el potasio; si no fuesen depurados producirían graves daños en el organismo. La membrana del dializador filtra estas partículas mediante dos mecanismos: Difusión, al contactar la sangre con alta concentración de partículas con un líquido donde la concentración es menor se produce un traspaso de estas sustancias, de tal forma que el líquido dializador arrastra las partículas excedentes. Convección, por la diferencia de presiones entre la sangre y el líquido de diálisis. Y,
Ultrafiltración: la máquina ejerce una presión artificial para eliminar el exceso de líquido que hay en el cuerpo del paciente debido a que el riñón pierde progresivamente la capacidad de excretar la orina. Por esta razón, el paciente pierde peso cada vez que asiste a una sesión de hemodiálisis. Pero hay que destacar que el paciente no está perdiendo grasa, sino líquido acumulado. Para saber cuánto peso (es decir, exceso de líquido) ha de perder un paciente cada vez que acude a diálisis, se establece un “peso seco”. Cada paciente tiene su propio peso seco, y se define este: "Como el peso ideal que debe tenerse siempre y cuando no tenga líquido acumulado. Así, por ejemplo, un individuo con un peso seco de 70 kilogramos, y si antes de conectarse a la máquina pesase 72 kilogramos,  debería perder en ella dos kilogramos de peso que ha acumulado en líquido. Cada vez que un paciente se dializa, se pretende, dentro de lo posible, que una vez termine la sesión consiga quedarse en su peso seco, ya que ello indicaría que se han eliminado los excesos de líquido en su cuerpo.

El efecto secundario más habitual que aparece por perder líquido durante una sesión de hemodiálisis es la bajada de tensión arterial (hipotensión arterial) y es más frecuente cuanto mayor sea la pérdida. La disminución de la tensión arterial puede causar mareo, calambres, náusea, vértigos e inconsciencia. En el otro extremo, el líquido en exceso se puede acumular en piernas y alrededor de los pulmones, dificultando cosas tan cotidianas como caminar y otras tan importantes como respirar. Tan importante como depurar líquido en la diálisis, es eliminar líquido excedente. La cantidad de líquido que un paciente adquiere entre dos diálisis dependerá directamente de la dieta que lleve, es decir, de la comida, y sobre todo de la bebida. El paciente en tratamiento de hemodiálisis tiene restricciones con la alimentación, debido a que el agua de las bebidas y alimentos no se elimina, sino que se acumula, y es muy importante que las cumpla por cuestión de salud y para evitar complicaciones cuando acuda a diálisis.

La parte de la terapia que lleva al paciente al esquema de las molestias, dolores y cuidado especial es que, para poder extraer la sangre del paciente y hacerla llegar a la máquina de diálisis se precisa de "un acceso vascular especial con dos canales de circulación de la sangre"; a través de un canal se envía sangre a la máquina para limpiarse, y a través del otro regresa la sangre ya depurada.


Fotografía de una Hemodiálisis. Tomada de Wikipdia.es.

Existen principalmente dos tipos de accesos vasculares: la fístula y el catéter.

La fístula arterio-venosa es la unión de una arteria a una vena con el fin de hacerla más fuerte y robusta, de tal manera que sea capaz de enviar y recibir sangre a altas velocidades. En algunos casos esta unión no es directa sino que se realiza a través de un material artificial denominado “Gore-tex” en el que se realizarán las punciones. Una vez terminada la diálisis se retiran las agujas, y el paciente procede a sujetar con una gasa estéril sobre el lugar exacto en que estaban introducidas. Dicha sujeción ha de realizarse fijamente y sin ejercer demasiada fuerza, para evitar dañar la fístula. Cuando el sangrado haya cedido por completo, se procede a realizar una cura sobre la zona en que estaban introducidas las agujas, y se cubre con un apósito. En las fístulas con prótesis, esto es, con el Gore-tex, las medidas a tomar son las mismas que en el caso de la fístula arterio-venosa, evitándose a toda costa la utilización de presiones mecánicas, como pueden ser las pinzas especiales de sujeción o compresores, porque pueden dañar la prótesis.

Resulta importante señalar que, si bien, un brazo portador de fístula arterio-venosa no queda inútil, si es recomendable que se adopen ciertas medidas para asegurar el funcionamiento de la fístula durante mucho tiempo: Empezando por la verificación frecuente, para ello debe palparse  la vibración, buscando hacerlo con frecuencia.
· No realizar ejercicios violentos con el brazo de la fístula ni someterlo a grades esfuerzos o cargas.
· Proteger la fístula de golpes, heridas y temperaturas extremas.
· No apoyarse en el brazo de la fístula para dormir, evitando ropa y objetos (reloj, pulseras…) que la compriman.
· Mantenerla siempre limpia, como el resto del cuerpo necesita una buena higiene (el mejor desinfectante es el agua y jabón).
· Retirar los apósitos de las punciones unas horas después de la hemodiálisis, asegurándose de que no sangra. No utilizar ese brazo para tomar la tensión arterial u otro tipo de punciones (analíticas) que no sean para la hemodiálisis.
· Ante cualquier cambio: enrojecimiento, disminución de la vibración o latido, dolor o inflamación o endurecimiento debe ser notificado por el paciente al personal de diálisis.

El catéter va a requerir la utilización de un dispositivo especial introducido en una vena de gran diámetro del paciente. Este dispositivo contendrá dos extensiones en la parte exterior; una para extraer la sangre y enviarla a la máquina, y otra por la que la sangre retorna al paciente, será un experto de enfermería quien deberá encargase de preparar el catéter en su conexión y desconexión. En la primera, mediante una cura estéril, se procede a extraer la "heparina" que está introducida en las dos luces del catéter que evitan que se formen coágulos durante el periodo interdiálisis, así como de comprobar una buena permeabilidad mediante suero fisiológico. En la desconexión se procede a limpiar y desinfectar el catéter y la zona de la piel del paciente, administrando la cantidad adecuada de "heparina" para dejarlo sellado y a colocando una bolsa protectora sobre el catéter que no será retirada hasta la siguiente sesión de diálisis.

La heparina —del griego ηπαρ, hígado—, es un glicosaminoglicano muy sulfatado que se utiliza ampliamente como anticoagulante inyectable, y tiene la densidad de carga más alta conocida de todas las biomoléculas.

Con objeto de evitar infecciones, bajo ningún concepto se puede levantar el apósito utilizado para cubrir el catéter. Por la misma razón no se debe mojar y hay que evitar que tome contacto con cuerpos extraños. Las infecciones de catéter, en muchos casos suponen que no se pueda volver a utilizar y requiera su extracción para colocar uno nuevo. Los síntomas de un catéter infectado son fiebre, temblores, sensación extrema de frío, dolor corporal, etc. 

El doctor Carmona refirió que en el año 2019, es decir, el anterior a la llegada de la pandemia de Covid-19, se realizaron 2 mil 989 cirugías sustitutivas de riñón, mientras que en el año 2021, durante la citada pandemia, la cirugías fueron tan sólo mil 971.

La incidencia es muy alta y expresó que: "Falta mucho por hacer, tomando en cuenta que cada año se diagnostican entre cuarenta mil y cincuenta mil nuevos casos de falla renal".

Por su parte Socorro Vital Flores, nefróloga en el Hospital Juárez de México, comentó que estimaciones internacionales indican que la enfermedad será la quinta causa de muerte en 2040, lo cual se explica porque el ochenta y seis por ciento de los afectados, también tienen el antecedente de diabetes mellitus (un cincuenta y dos por ciento) o hipertensión arterial (el treinta y cuatro por ciento).

Ambos padecimientos están entre los males crónicos más frecuentes en el país, y que representan dos de las comorbilidades más frecuentes de diagnostico médico reservado al presentarse en pacientes con Covid-19.

Al entrar en detalle, la especialista Vital Flores, comentó: "Hay cinco etapas en la insuficiencia renal, que se determinan en función de la presencia de daño renal y de la "tasa de filtración glomerular" (TFG), es decir, la medición de su nivel de funcionamiento renal. En las primeras tres, los afectados no presentan síntomas de deterioro en el órgano, por lo que la mayoría acude a los servicios de salud cuando aparecen manifestaciones como  son: hinchazón en extremidades, alteración en la presión arterial, espuma en la orina, cansancio, palidez y mal estado general. Sin embargo existen otras, comor malestares gastrointestinales, pérdida del apetito, náuseas al despertar, sabor metálico en la boca, sangrado en las encías y vómito con sangre".


Ilustración del Día Mundial del Riñón. Tomada de Especialidades Sid.cu. 

Tabla del indice de la tasa de filtración glomerular. (TFG)

Etapa 1 con TFG normal o alto (TFG > 90 mL/min)
Etapa 2 Enfermedad Renal Crónica leve (TFG= 60-89 mL/min)
Etapa 3A Enfermedad Renal Crónica moderada (TFG = 45-59 mL/min)
Etapa 3B Enfermedad Renal Crónica moderada (TFG = 30-44 mL/min)
Etapa 4 Enfermedad Renal Crónica Grave (TFG = 15-29 mL/min)
Etapa 5 Enfermedad Renal Crónica en etapa terminal (TFG < 15="">

El doctor Cardona precisó que las cifras de casos y defunciones son estimaciones a partir de indicadores internacionales, porque en México, lamentablemente, no existe registro de personas con el mal. Se sabe también que se presenta un subreporte de decesos. Las estadísticas oficiales indican que al año ocurren menos de veinte mil muertes, pero se calcula que en realidad son alrededor de sesenta mil. Esto es así, explicó el doctor: "A causa de que la falla renal aumenta el riesgo de afecciones cardiovasculares, que en México representan la principal causa de fallecimiento, o a que los médicos asientan como causa de la defunción diabetes u otros padecimientos".

El especialista también abordó el problema económico y resaltó que: "La insuficiencia renal crónica provoca gastos catastróficos y no existe un sistema de salud capaz de absorber el costo de la atención y los tratamientos, por lo que se debe apostar por la prevención, que es llevar una dieta saludable, realizar ejercicio físico, mantener en control los niveles de azúcar y realizarse un examen general de orina una vez al año, entre otras acciones".

Este fenómeno con respecto a la Diabetes Mellitus no es privativo de México, hoy se vive, con todos los elementos que contribuyen una la pandemia mundial de diabetes, que es un problema creciente de salud pública, pese a la mejor comprensión de sus mecanismos y a los avances en su tratamiento. Si en 1980 unos 108 millones de personas padecían diabetes en el mundo, hoy la cifra ronda los 422 millones. Se calcula que, en 2016, 1.6 millones de personas murieron a causa de la diabetes. A nivel global, el porcentaje de personas que padecían diabetes en 1980 era de 4.3% en los hombres y 5% en las mujeres; para 2014 había subido a 9% y 7.9%, respectivamente.

La medicina preventiva es mucho más económica que la versión curativa o paliativa, pero no está entre las costumbres de las grandes mayorías.

La realidad de la sociedad mexicana, en el aspecto salud colectiva está comprometida, existe una institución "La Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica", A. C. (AMIIF), que representa a más de sesenta empresas mexicanas -de capital nacional e internacional con presencia local y global- y que son líderes en desarrollo de investigación farmacéutica y biotecnología, comprometidas con el desarrollo de nuevos medicamentos y opciones terapéuticas que permitan curar o cambiar la ruta de una enfermedad, mejorar la calidad de vida y, en algunos casos, las probabilidades de sobrevivir a enfermedades que amenazan seriamente no solo la vida de las personas, sino la manera en la que estas se relacionan con su trabajo, su familia y su comunidad. Y presentan el análisis estadístico referente a las causas de fallecimiento de los mexicanos, y publicaron en su página de Internet, derivado del informe del "Instituto Nacional de Estadística y Geografía" (INEGI) dio a conocer, el 28 de octubre del 2021, que acontecieron un millón ochenta y cinco mil novecientas ochenta y seis en el año 2020, de ellas, el 92.4%, es decir, un millón cuatro mil ochenta y tres defunciones, se debieron a enfermedades y problemas de salud con los siguientes porcentajes:

Causas de mortalidad en México 2020:
Enfermedades del corazón: 218,704 muertes que  representan el 20.1%; 
por la pandemia de Covid-19: 200,256 fallecimientos que significan el 18.4%; 
por Diabetes mellitus: 151,019 decesos que indican el 13.9%;
por Tumores malignos: 90,603 muertes que representan el 8.3%;
por Influenza y Neumonía: 58,038 fallecimiento que equivalen a 5.3%.

Y nos regala estadísticas detallas al respecto. Del un millón ochenta y cinco mil novecientas ochenta y seis muertes, la mortalidad por género fue de: 639 mil 277 muertes, que correspondieron a varones el 58.8%y 446 mil 709 decesos a mujeres, el 41.1%.

Las mayores tasas de defunciones registradas por cada diez mil habitantes, por entidad de residencia, ocurrieron en: Ciudad de México (116), Chihuahua (105), Sonora (94), Morelos y Veracruz (ambas con 94). Al contrario, las tasas más bajas se presentaron: en Quintana Roo (59), Baja California Sur (61), Querétaro (63) y Aguascalientes (67).

En cuanto al grupo de edad, la mayoría de decesos se concentra en las personas de 65 años y mayores, con 605,973 (55.8%), lo que es normal al presentar a estas edades, las mayores probabilidades de fallecimiento.

Así para el año 2020,  las cinco primeras causas de fallecimientos relacionados con problemas de salud entre los hombres, fueron: Covid-19, enfermedades del corazón, diabetes mellitus, tumores malignos e influenza y neumonía; y
por su parte, entre mujeres, las enfermedades del corazón fueron la principal causa de fallecimiento, seguida de: diabetes mellitus, Covid-19, tumores malignos e influenza y neumonía.

Mientras que en el año anterior, 2019, es decir, antes de los efectos causados por la pandemia, las cifras fueron:

Causas de mortalidad en México 2019:
Enfermedades del corazón 156,041;
Diabetes mellitus 104,354;
Tumores malignos 88,680;
Enfermedades del hígado 40,578;
Agresiones homicidios 36,661.


Ilustración de la Diabetes Mellitus. Tomada de vidiabetes.com

La pandemia de Diabetes Mellitus en México.

El INEGI, ha informado del número de muertes por Diabetes Mellitus, y su constante incremento, pues en 1970 alcanzaron 14 mil 600, 45 mil en el año 1999, 83 mil en el 2010 y 106 mil en 2017.

México es el sexto país en número de adultos con diabetes, la cifra ronda alrededor de doce millones de personas, en 2018, el 38.6% de la gente con diabetes no había sido diagnosticada, y esta cifra podría llegar a 21 millones en 2045, en caso de emprender acciones efectivas para. frenar el ascenso en el número de casos. El proceso, ha incidido en que el número de muertes por diabetes ha ido en aumento en los últimos 70 años, pero desde la década de los ochentas del siglo Veinte, se sitúa entre las principales causas de muerte en el país. Esto refleja la transición epidemiológica que ha atravesado México. El aumento en la esperanza de vida y una mayor prevalencia de factores de riesgo como la alimentación rica en grasas y azúcares, la falta de actividad física y la obesidad son algunas causas del crecimiento de la diabetes y otras condiciones no transmisibles, como las enfermedades cardiovasculares y el cáncer.

Las enfermedades no transmisibles siguen siendo uno de los principales retos que debe afrontarse en México, y es de la mano de la innovación y la investigación que podría cambiar la ruta de estas enfermedades, Diabetes y Crónica de Riñón, y con ello cambiar la vida de las personas, sus familias y sus comunidades. 

Como atinadamente indicó el doctor José Guadalupe Carmona, la diabetes y sus complicaciones implican una fuerte carga económica para los sistemas de salud. A nivel mundial, el gasto en salud debido a la diabetes subió de 232 mil millones de dólares en 2007 a 727 mil millones de dólares en 2017; se estima que alcanzó los 760 mil millones en 2019. Las proyecciones indican que alcanzará los 825 mil millones en 2030 y 845 mil millones en 2045. En México, este gasto fue de 17 mil millones de dólares en 2019. Se estima que el 50% de este gasto corresponde al tratamiento de las complicaciones.

Sin embargo, la investigación referida a la mejora de las condiciones de mejora en la calidad de vida de la especie humana avanza, y hoy presenta este proyecto, que incluso alcanza a esperanzar con sus resultados a los miles de personas que esperan un nuevo órgano para el trasplante de riñón.


Micrografía de una célula madre de adulto que muestra características ultra estructurales típicas. De Robert M. Hunt, trabajo propio.

Eficacia alcanzada en terapia de rejuvenecimiento celular sin que se presente la contraindicación de generación de tumores u otros problemas orgánicos.

Un equipo de investigadores liderado por el doctor en Bioquímica y Farmacología por la Universidad de BoloniaJuan Carlos Izpisua Belmonte, catedrático de Biología del Desarrollo de la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM) y profesor del Laboratorio de Expresión Génica del Instituto Salk en California, Estados Unidos, consiguió rejuvenecer ratones sin que generen tumores ni otro problema de salud, gracias a la terapia de rejuvenecimiento celular, cuyo trabajo se publicó en "Nature Aging", que es una revista temática de "Nature" que sirve a la amplia comunidad de investigación acerca del envejecimiento.

Afirmo Izpisua: “Nuestros resultados indican que podemos utilizar este método para retrasar el envejecimiento en animales de forma natural. La técnica es segura y eficaz en ratones. Además de permitirnos abordar las enfermedades relacionadas con ese proceso, este enfoque proporciona a la comunidad biomédica una nueva herramienta a fin de recuperar la salud de los tejidos envejecidos y del propio organismo, mejorando el funcionamiento de las células en diferentes situaciones patológicas, como, por ejemplo, las enfermedades neurodegenerativas, del sistema musculo-esquelético, de la piel o problemas renales”.

A medida que los organismos envejecen, no sólo cambia su aspecto exterior y su salud; cada célula del cuerpo tiene un reloj molecular que registra el paso del tiempo. Las células aisladas de individuos de edad avanzada presentan marcas epigenéticas en el Ácido desoxirribonucleico (ADN), debidas al estilo de vida y a la interacción con el medio ambiente, diferentes a las existentes en individuos jóvenes. La epigenética es un campo emergente de la ciencia que estudia los cambios hereditarios causados por la activación y desactivación de los genes sin ningún cambio en la secuencia de ADN subyacente del organismo)


Ilustracion de los cuatro factores genéticos de Yamanaka. Tomada de Scolastic Scholar.org.

El tratamiento de las células envejecidas con una mezcla de cuatro factores de reprogramación celular (Oct4, Sox2, Klf4 y cMyc), también conocidos como “Factores de Yamanaka”, puede borrar esas marcas epigenéticas acumuladas con el paso del tiempo, de tal forma que las células adultas se pueden convertir, desde el punto de vista del desarrollo, en "células madres".

Adicionalmente Estrella Núñez, coautora de la investigación y vicerrectora de Investigación de la UCAM, abundó el tema al declarar: “En 2016, cuando se inició este proyecto de la mano de Izpisua Belmonte, publicamos, por primera vez, que utilizando los "Factores de Yamanaka" se podía revertir el envejecimiento y aumentar la vida útil de ratones que padecían "progeria", que es una enfermedad que provoca envejecimiento prematuro. Pero, posteriormente, en el año 2021, en un trabajo desarrollado en colaboración con el Comité Olímpico Español, se informó que, incluso en ratones jóvenes, esos factores pueden acelerar la regeneración muscular, y basándose en estas publicaciones, otros equipos científicos han mejorado la función de tejidos de órganos, como el corazón, o el cerebro y también en el nervio óptico”.

Ha asegurado Izpisua Belmonte: “Queremos devolver la plena funcionalidad y capacidad de recuperación a las células envejecidas o que han perdido su función para que sean más resistentes al estrés, a las lesiones y a las enfermedades. Nuestros resultados demuestran que, al menos en ratones, hay un camino para conseguirlo”.


Micrografía de células madre embrionarias de ratón teñidas con un marcador fluorescente verde. Tomada de Wikipedia.com

Como hoy se sabe, las "células madre" pueden ayudar a las personas  que sufren de lesiones de la médula espinal, o diabetes Mellitus, o enfermedad de Parkinson, esclerosis lateral amiotrófica, enfermedad de Alzheimer, enfermedad cardíaca, accidente cerebrovascular, quemaduras, cáncer y osteoartritis.

Recorderamos que una "célula madre" es una célula que tiene el potencial de formar muchos de los tipos diferentes de células encontradas en el cuerpo. Cuando las "células madre" se dividen, pueden formar más células madre, e incluso, otras células que realicen funciones especializadas. A partir de la generación de las "Induced Pluripotent Stem" (IPS) o en español "Célula madre pluripotentes inducidas", capaces de generar la mayoría de los tejidos, y que son derivadas artificialmente de una célula que inicialmente no era pluripotencial, con los trabajos del ganador del Premio Nobel de Medicina del año 2012, Shinya Yamanaka (nacido el cuatro de septiembre de 1962), quien actualmente es profesor del Institute for Frontier Medical Science, y Director del Center for iPS Cell Research and Application (CiRA), el Institute for Integrated Cell-Material Sciences (iCeMS), en la Universidad de Kioto, y que en el año 2006, obtuvo las primeras (IPS) de ratones y que en el 2007, obtuvo (IPS) de células humanas. Y en este punto como expresó el doctor Izpisua Belmonte, hay caminos para avanzar, lo que pero haga diferencia en el panorama actual entre los afectados por la Enfermedad Renal Crónica, tanto por la eficiencia de los tratamientos, así como por los costos, que no signifiquen la imposibilidad de acceder a ellos a los millones de seres humanos que padecen la enfermedad.

La "Machincuepa Cuántica" seguirá de cerca los resultados de estas investigaciones. El futuro es prometedor.



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